SITIOS RELIGIOSOS
Catedral de Sal de Zipaquirá
Zipaquirá
La población de Zipaquirá está ubicada a 50 km de Bogotá y en ella se encuentra la Catedral de Sal, invaluable por sus características arquitectónicas que evocan las creencias religiosas del catolicismo.
Esta catedral es ejemplo de laboriosa ingeniería y de manifestaciones artísticas plasmadas en la roca salina, pero principalmente, es la mayor expresión de fe de los devotos mineros de Zipaquirá.
Lo más asombroso de este lugar es el ingenio para crear en el mundo subterráneo de la antigua mina de sal, explotada desde la época de la Conquista, un solemne y majestoso templo de 8.500 metros en el que sobresalen el recorrido del Viacrucis y la enorme cruz de 16 metros, esculpida en la nave central.
La Catedral de Sal es uno de los baluartes turísticos de la región y de Colombia, y es uno de los destinos religiosos más famosos y visitados del país.
Para su construcción fueron extraídas unas 240 mil toneladas de sal del Domo de la Sal de Zipaquirá, y trabajaron 127 mineros, 80 talladores y 110 trabajadores en la zona externa.
El recorrido por este espectáculo de luminosidad, sombras y grandeza se divide en tres tramos básicos:
- El deambulatorio o Viacrucis.
- La Cúpula, la Rampa de Descenso, el Coro, los Balcones y el Complejo del Nartex (laberinto).
- Las grandes Naves de la Catedral.
El descenso hacia la Catedral es lento, durante su transcurrir se diluye la noción del tiempo, de la luz, del calor, del sonido, del color, del viento y del movimiento. Es el camino a una nueva visión interior, a un mundo subterráneo inmutable y misterioso, que invita a meditar, reflexionar, orar y a vivir una auténtica experiencia cultural.